BUENOS AIRES, 23 Abr. (Mario Poliak) -
Rectores y estudiantes universitarios reclamaron hoy al Gobierno que no reprima la marcha que tendrá epicentro hoy en Plaza de Mayo, con réplicas en todo el país, en demanda de mayor presupuesto tras los recortes sufridos por la "motosierra" del presidente Javier Milei.
La referencia estuvo dirigida especialmente hacia la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien advirtió que aplicaría el "protocolo antipiquetes", que entre otras cosas impediría, por ejemplo, circular a decenas de miles de personas por las calles para evitar los cortes de tránsito.
"En esta universidad se recibió (el asesor presidencial Federico) Sturzenegger y (el gobernador bonaerense, Axel) Kiccillof. ¿De qué adoctrinamiento nos hablan?", se preguntaron los convocantes a la marcha, saliendo al cruce de una de las acusaciones que a diario lanza el jefe del Estado y su entorno sobre la educación pública.
La principal concentración, que se realizará desde el Congreso hasta el histórico paseo frente a la Casa Rosada, recibió el apoyo de las centrales sindicales y de varios sectores ajenos a la comunidad educativa y científica, como partidos políticos, organizaciones sociales y de defensa de los derechos humanos, entre otros.
Al acto también se sumarán algunas de las universidades privadas del país, según anunciaron en los últimos días.
La conferencia de prensa fue convocada por los gremios CTERA, Conadu, Conadu Histórica, FUA, Fedun, UDA, Fagdut, Fadun y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), con la presencia de rectores de las casas de altos estudios que adhieren a la convocatoria.
El rector de UNLPam (La Pampa) y vicepresidente del CIN, Oscar Alpa, dijo que hablaba "en representación de los más de 2 millones de estudiantes del sistema público, de los 60 mil no docentes de nuestro sistema universitario, de más de 155 mil docentes".
Al enumerar los reclamos de los organizadores, señaló en primer término el presupuesto universitario, que quedó sin actualizar desde el año pasado, lo que, dijo, "implica para muchas carreras que no pudieran avanzar" por no contar con suficientes fondos para los gastos de funcionamiento.
También citó la paralización de las obras en las universidades, incluso las certificadas a más de 90 por ciento, que, según indicó, "sería más barato terminarlas que abandonarlas".
En cuanto al atraso salarial, deploró que llega a "más de 50 por ciento con respecto a la última actualización de noviembre" y comparó la pérdida de estos cuatro meses de gobierno libertario con "los cuatro años de (Mauricio) Macri", en tanto señaló que "los docentes quedaron bajo la línea de pobreza".
Otros temas están vinculados al retraso en los montos de las becas y a los recortes en el Conicet, el organismo nacional de Ciencia y Tecnlogía.
Los rectores dijeron estar "abiertos al diálogo", pero advirtieron que "la verdad es que no se están dando y por eso se está planteando esta movilización federal".
En tanto, los dirigentes sindicales mostraron mayor dureza y rechazaron que las universidades no hayan tenido auditorías. "Nunca aparecieron casos de corrupción en los presupuestos universitarios", aseguraron con vehemencia.