BUENOS AIRES, 29 Abr. (Mario Poliak) -
La Cámara de Diputados se apresta hoy a aprobar "en general" la nueva Ley Bases, consensuada entre el oficialismo y la oposición "dialoguista", aunque subsisten dudas acerca de si la votación "en particular" se hará por capítulos, como se anunció en principio, o artículo por artículo.
Para saber esto será importante la organización en la reunión de la comisión de Labor Parlamentaria, que se realizará en horas de la mañana. Cómo resulte la votación en la cámara baja, podría ser clave para determinar la suerte del proyecto en Senadores.
La sesión en el recinto está prevista para el mediodía. Junto a la iniciativa, los diputados deberán votar también una cuestión aparte referida al paquete fiscal, consensuado previamente con las provincias.
La Ley Bases es la nueva versión, aunque mucho más acotada, de la que el Ejecutivo presentó en enero pasado y que, tras largos cabildeos, decidió retirar y devolver a comisión, con lo que el proyecto perdió estado parlamentario.
La decisión la tomó en su momento el presidente Javier Milei, cuando vio que comenzaban a caerse, uno a uno, los principales artículos de la iniciativa.
Con nuevo jefe de bloque en La Libertad Avanza, con apoyo del PRO y de otras bancadas "blandas" de opositores, entre ellos la UCR y Hacemos Coalición Federal, de Miguel Pichetto, el oficialismo espera tener mejor suerte esta vez, aunque recientemente el presidente Javier Milei salió a advertir que "aunque la tiren abajo, (el cambio) lo vamos a hacer igual".
El nuevo proyecto sigue contando con la férrea oposición del bloque kirchnerista Unión por la Patria, así como de algunos diputados de otros bloques. El número clave para aprobar o rechazar la normativa es de 129 legisladores, es decir, la mitad más uno de la Cámara.
En la reunión previa de Labor Parlamentaria, presidida por el titular de la Cámara, Martín Menem, se definirán los tiempos y modos con los que será debatido el proyecto en el recinto. La discusión por capítulos busca neutralizar algunas objeciones que podrían hacerse sobre cada artículo en particular.
Entre los temas más controvertidos están las emergencias que otorgan facultades delegadas al Poder Ejecutivo, algunas de las cuales ya están vigentes gracias al DNU 70/23, que ahora depende de la aprobación en Diputados para mantenerse en pie, tras el rechazo en el Senado.
También el de los fondos fiduciarios y la incorporación de esa masa de recursos a la coparticipación federal, además de las privatizaciones de organismos y de empresas públicas. La cuestión de la reforma laboral ya fue zanjada con los sindicatos.
En materia fiscal, el piso del Impuesto a las Ganancias es un tema a definir. El proyecto oficial prevé un mínimo no imponible de $1,8 millón para solteros y de $2,2 millones para casados con dos hijos; también el blanqueo de capitales, sobre el que subsisten dudas por vacíos legales que podrían abrir las puertas al dinero proveniente del narcotráfico, y el Impuesto a los Bienes Personales, entre otras cuestiones.
Si todos estos puntos lograran pasar la instancia de la cámara baja, cosa que está por verse, luego los aguardaría otra barrera más difícil de sortear, la del Senado, donde el kirchnerismo es primera minoría con 33 voluntades, a solo cuatro del quórum propio.