BUENOS AIRES, 25 Abr. (Mario Poliak) -
Luego de dejarse ver, apenas unos minutos, el día de la marcha universitaria, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner reaparecerá el próximo sábado, y lo hará en la localidad bonaerense de Quilmes. La líder política ya adelantó que será "una buena oportunidad para reflexionar sobre este particular momento".
Esa oportunidad será la inauguración del microestadio que llevará el nombre de su fallecido esposo Néstor Kirchner, y lo hará junto a la intendenta local, la camporista Mayra Mendoza.
La fecha será en coincidencia de los 21 años de la elección presidencial de 2003, que a la postre llevaría al poder (renuncia al balotaje mediante de Carlos Menem) al ex gobernador santacruceño, inaugurando el extenso ciclo kirchnerista de más de 12 años.
Según sus propias palabras, la motivación que la llevó a aceptar la invitación fueron las declaraciones del presidente Javier Milei del lunes, cuando utilizó la cadena nacional para anunciar un superávit fiscal de 0,2% en el primer trimestre del año, entre otros logros.
Cristina Kirchner anunció que hablará en Quilmes
"Esa misma noche escuché al presidente Javier Milei por cadena nacional explayarse sobre el resultado de su gobierno al que calificó de 'milagro económico' y 'hazaña de proporciones históricas a nivel mundial'", dijo, citado algunas otras consideraciones.
Con cierta picardía, agregó que "resultó conmovedor escucharlo decir 'no es magia'", aludiendo a su famosa frase que supo utilizar reiteradamente en la etapa final de sus dos mandatos.
"Creo que es una buena oportunidad para reflexionar sobre este particular momento de la historia argentina, sobre este experimento del anarco-capitalismo y el sacrificio inútil al que está siendo sometido el pueblo argentino", advirtió CFK.
La última vez que se la vio a la ex vicepresidenta fue el martes por la tarde, cuando se asomó al balcón del Instituto Patria, que preside, para saludar a un grupo de adherentes que pasaba por el edificio a pocas cuadras del Congreso, desde donde partió la movilización estudiantil hasta Plaza de Mayo.
Allí blandió un buzo con las siglas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), la casa de estudios donde se recibieron tanto ella como su fallecido esposo. Previamente, había compartido un mensaje en sus redes sociales en apoyo a la marcha y destacando la creación de 16 nuevas universidades creadas durante la era K.
"Lo pudimos hacer cuando revertimos la relación entre los recursos afectados a la educación y al pago de la deuda externa. En el 2003: 3% del PBI para educación y 5% para deuda externa. En el 2015, al cabo de los tres períodos de gobierno: 6,3% del PBI para educación y 1,5% para deuda pública. No fue magia", reiteró la ex mandataria. Seguramente una ironía dirigida al presidente Milei.