BUENOS AIRES, 30 Abr. (Mario Poliak) -
El presidente Javier Milei recibió en el puerto de Buenos Aires al guardacostas Cutter James, de originen norteamericano, que participará en un ejercicio conjunto con la Prefectura Naval, en el límite de la Zona Económica Exclusiva, contra la pesca ilegal.
La presencia del jefe del Estado, vestido con uniforme de la Prefectura, es una señal más de acercamiento entre Estados Unidos y la Argentina, sobre todo en un tema en el que los principales pesqueros apuntados por la administración libertaria son de bandera china.
Estuvieron también la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el director de la Prefectura, Guillermo Giménez Pérez. Todos ataviados con el uniforme de esa Fuerza de Seguridad.
La mayor aproximación entre los dos gobiernos se viene dando, hasta ahora, básicamente en dos planos: el de la Defensa y la Seguridad.
El USCG Cutter James es uno de los barcos más grandes y avanzados en tecnología de la Guardia Costera de los Estados Unidos. Como gesto de confraternidad, dos oficiales de la Prefectura llegaron al puerto argentino a bordo del buque.
Su arribo a aguas argentinas se produce poco después de la visita que realizara al país la generala Laura Richardson, jefa del Comando Sur, así como a la más reciente compra de aviones caza F-16, de fabricación norteamericana, a Dinamarca, cuya aprobación formal se publicó ayer en el Boletín Oficial.
Estas y otras visitas se produjeron en el marco de un realineamiento del gobierno de Milei con Washington, quien viene presionando para desalentar a la Argentina de su acercamiento a Beijing, iniciado por el gobierno de Cristina Fernández y seguido por la administración de Alberto Fernández.
La Prefectura Naval emitió un comunicado que destaca que la llegada de la embarcación se enmarca "en un momento significativo en la continua colaboración entre Estados Unidos y Argentina, orientada a mejorar la seguridad marítima y combatir actividades ilícitas en el mar".
Precisó que el buque tiene 127 metros de eslora por 16 de manga y su tripulación es de 111 hombres y mujeres, que realizará ejercicios conjuntos con sus pares argentinos para "enfatizar el espíritu de cooperación de la misión".
Según se informó, la misión estadounidense está dedicada a misiones como el combate al tráfico de drogas y la vigilancia de actividades de pesca ilegal, no reportada y no regulada en el Atlántico.
Según la Prefectura, "su trabajo no solo apoya las necesidades de Estados Unidos, sino que también contribuye a la estabilidad y seguridad regional".