BUENOS AIRES, 22 Mar. (Mario Poliak) -
La vicepresidenta Victoria Villarruel marcó diferencias con Javier Milei en temas como la participación de militares en la represión al narcotráfico, sueldos de senadores y los pliegos de los nuevos integrantes de la Corte Suprema, entre otras cuestiones; en ese marco, le envió un mensaje a su compañero de fórmula: "Esto no es un reinado", dijo.
Asimismo, sostuvo que "no hay una versión seria" sobre la posibilidad de declarar un indulto a los militares presos por delitos de lesa humanidad. "No me consta de que se hable seriamente, no me llegó eso", aclaró, descartando algunas versiones que señalaban la inminencia de esa medida al cumplirse un nuevo aniversario del golpe del 76.
Según dijo, la solución a la cuestión de los que están detenidos "es jurídica" y agregó que "el Derecho no dice lo que se interpretó". Además, frente a las marchas previstas para el domingo por el Día de la Memoria, señaló que "Estamos en un Estado democrático, si quieren 'festejar' (sic) el golpe, allá ellos, claramente hay un morbo con eso", opinó.
La vicemandataria advirtió, en otro orden, que no se puede andar "con la motosierra" despidiendo gente si después "te vas a comer un montón de juicios", y defendió los aumentos auto concedidos a los miembros de las cámaras legislativas, que el jefe del Estado hizo retroceder.
Asimismo, dijo haberse enterado "por los medios" de las nominaciones de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para ocupar las vacantes en la Corte Suprema, a pesar de que ambos deben pasar el filtro de la cámara alta, que ella preside.
La vicepresidenta se distanció de la candidatura de Lijo al recordar que "no actuó bien en la causa (del sindicalista asesinado en los años 70 José Ignacio) Rucci".
"No me deslumbra. Esperaba que, siendo la vacante de una mujer..", agregó, aludiendo a la retirada Elena Highton de Nolasco y dejando en claro su postura a favor de que se respete el cupo de género.
En cuanto a la participación militar en la lucha contra los narcos de Rosario, a diferencia de los ministros Patricia Bullrich y Luis Petri recordó que "en los '70, los integrantes de las Fuerzas Armadas terminaron todos presos". Ese mismo argumento había utilizado en su momento Cecilia Pando para reclamar una amnistía a los ex represores.
Recordó que "la función de los militares no es combatir civiles. Pensé que había quedado claro en los '70. El narco es un civil: en los '70 se combatió el terrorismo ¿Y ahora dónde están los que lo combatieron?: Presos", y remarcó que en Argentina las fuerzas militares "sólo pueden combatir ante una declaración de un estado de sitio o un enemigo estatal extranjero".
"A mí me parece que si vos vas a enviar a un agente del Estado a combatir al narco o a un terrorista, hoy la Ley (de Seguridad Interior) no te lo permite", insistió. "Si hacemos eso, se tiene que hacer cargo el Estado. Hoy hay gente que están pagando penas de prisión más elevadas que las que pagaron (Jorge Rafael) Videla y (Emilio Eduardo) Massera", enfatizó.
Más allá de las pretensiones de Bullrich y Petri, de que esa cuestión "se modifique", indicó que, en las condiciones actuales, "un militar va a ser plausible de una condena por un asesinato".
También se refirió a las responsabilidades sobre la seguridad, que en principio iba a quedar en sus manos y fueron delegadas finalmente en Bullrich por decisión presidencial: "No me agradó, pero lo tengo que respetar", se resignó.
La mandataria apuntó, por otro lado, contra el diputado José Luis Espert, por haber llamado a una rebelión fiscal en la provincia de Buenos Aires. Según dijo, eso "a la gente le importa cero" y aseguró que, en todo caso, "no puede pagar los impuestos porque no tiene plata".
"Pero, como funcionario público (sic) no puede llamar a la rebelión fiscal", le advirtió, además de calificarlo de "petardista" por haber sugerido que ella quería "desestabilizar" a Milei, al convocar a sesión cuando se preveía que el Senado podría rechazar el DNU presidencial.
En cuanto al despido masivo de empleados públicos, le recordó al Presidente que existe la "inmunidad laboral" en el Congreso: "No se puede andar con la motosierra así porque sí, si después te vas a comer un montón de juicios", le advirtió.
Consideró que "todos tienen que ganar de acuerdo a la función que tienen" y que, en el caso de los senadores, explicó que debió dar marcha atrás con los aumentos porque "me lo pidió el Presidente".
En esa línea, recordó que "acá hay 72 senadores a los que la gente le delega su vida. Después hablamos si lo hacen bien o mal, pero la función que les estamos delegando es vital, y si les pagás poco, van a ser susceptibles a la corrupción".
En tal sentido, afirmó que "la corrupción es parte de una identidad en la Argentina" y aseveró que "si no ganan bien, solo van a poder ser diputados o senadores los ricos o los corruptos. No estoy de acuerdo con la idea de equiparar para abajo", agregó.
No obstante mostrar su alineamiento con los recortes en los gastos, Villarruel advirtió que "hay que hacerlos con cuidado de que no generen un conflicto mayor".
"Hay que entenderlo, esto no es un reinado, es un poder del Estado con reglas; tengo que respetar cuestiones que son legales", explicó, en un presunto tiro por elevación hacia la figura presidencial.
Villarruel también fue consultada por el atentado que denunció la agrupación H.I.J.O.S contra una de sus militantes: "Que investigue la Justicia" dijo, con una mueca de escepticismo, y recordó que "en todo momento estuvieron hablando de Santiago Maldonado, Julio López, y estaban ellos en el poder. Hay que cortarla con el relato que hace la izquierda".
Por último, reiteró su alineamiento con el presidente Milei, al afirmar que "somos dos personas que se complementan. El es vehemente en la vida pública y yo soy al revés, soy más templada en la vida pública. En privado son extrovertida y él es más tranquilo", contrapuso.