BUENOS AIRES, 26 Abr. (Mario Poliak) -
El ministro de Economía, Luis Caputo, realizó una curiosa oferta a los empresarios consistente en que bajen los precios a cambio de reducirles los impuestos, contrariando uno de los principios fundamentales de la administración libertaria como es la autorregulación del mercado.
Una medida similar fue recientemente puesta en práctica con el sector de la medicina privada y, como no dio resultado "por las buenas", el Gobierno se vio forzado a retrotraer los precios a diciembre y actualizarlos solo por inflación de manera compulsiva, a través de un DNU.
En un encuentro reservado con un grupo de formadores de precios que trascendió a la prensa, el titular del Palacio de Hacienda les hizo la propuesta y, según se consignó, habría tenido buena recepción de los ejecutivos.
Caputo les explicó que con esa medida podrían vender más y les aclaró que el tipo de cambio se mantendrá estable, según precisó el portal Infobae citando a participantes del cónclave, organizado por "una entidad que realiza desayunos entre empresarios y funcionarios en forma habitual, además de su tradicional evento anual en primavera".
El argumento esgrimido por Caputo es que la mayoría de los precios se fijaron con la expectativa de un dólar a $2.000 antes de la llegada de Javier Milei a la Presidencia, pero a pesar de que la divisa estadounidense se estabilizó a la mitad de ese valor, los precios no bajaron, al menos como pretende el equipo económico.
Además, en un contexto de caída real de los ingresos, la demanda no se mueve y empeora los índices de recesión económica. Detrás de esta idea subyace el principio heterodoxo de que, con un mercado interno más activo, se produciría un círculo virtuoso de aumento de la recaudación y el superávit fiscal se alcanzaría más rápidamente, que es en definitiva la meta central impuesta por el FMI.
Así, las autoridades económicas ven más factible poder reducir impuestos, tal como se comprometió Milei pese a su obsesión de sostener el equilibrio fiscal alcanzado en el primer trimestre.
Según agregaron las fuentes consultadas, Caputo, quien llegó recientemente de Washington, donde participó de la asamblea de la primavera boreal del Fondo y el Banco Mundial, no dio precisiones sobre la posibilidad de conseguir fondos frescos de organismos multilaterales.
En ese sentido y según trascendió días atrás, funcionarios del Gobierno (la canciller Diana Mondino y el titular del BCRA, Santiago Bausili) se aprestarían a viajar a China para renovar el swap de monedas con la potencia asiática, que está próximo a vencer, por 5.000 millones de dólares, monto que se necesita para hacer frente a distintas obligaciones internacionales a lo largo del año.
Por último, se informó que el ministro los invitó a invertir, pese al contexto recesivo pero de freno a la emisión monetaria y caída de la inflación. La aprobación de la Ley Bases ayudaría a dar previsibilidad a los hombres de negocios, según dijeron, que de todas formas dudan acerca de la sostenibilidad en el tiempo del tipo de cambio.