BUENOS AIRES, 8 May. (Mario Poliak) -
El crédito en pesos "no logra despegar" a pesar del agresivo recorte en las tasas de interés implementado por el Banco Central, lo que se constituye en una clara señal de la magnitud de la recesión por la que está atravesando la economía, aun con el retroceso de la inflación.
Un informe privado reveló caídas reales interanuales de los préstamos bancarios con variaciones registradas muy por debajo de la inflación. Las tasas retrocedieron, en apenas cinco meses, del 100 al 50 por ciento.
Con ese panorama, las entidades financieras se lanzaron a ofrecer préstamos al sector privado con condiciones muy atractivas, buscando generar reactivación por el lado de la oferta.
Pero, según el estudio del First Capital Group, así y todo el repunte parece no llegar: "No se observa aun un despegue del financiamiento en pesos al sector privado a pesar de los esfuerzos que realiza el sector financiero por reemplazar las inversiones que antes se destinaban a abastecer al sector público", indicó en análisis.
Agregó que, en abril, "el saldo total de préstamos en pesos al sector privado alcanzó un nivel de $21,6 billones, representando una suba en los últimos 365 días de $12,5 billones, equivalente al 138,9% anual, valores que se encuentran por debajo de la inflación del período", calculado en torno al 290% acumulado anual.
Particularmente, el último mes tuvo una variación de $1,5 billones, lo que representa un incremento de 7,6% en valores nominales, también "por debajo del incremento de precios proyectado para ese período".
En cambio, la línea de préstamos personales aumentó en términos nominales 13,6% mensual, con un crecimiento interanual de 113%, facilitado también por la reducción de la tasa de interés.
Asimismo, el informe señaló que las operaciones con tarjetas de crédito registraron un total de más de $7 billones, lo que representa una suba de 10,6% nominal respecto al mes anterior, por encima de los valores inflacionarios esperados.
El crecimiento interanual en este segmento del mercado alcanzó a 176,8%, en este caso por debajo de la inflación estimada del año, es decir, una caída en términos reales.
Finalmente, los créditos hipotecarios registraron en abril una baja de 0,2% respecto del stock de $590.731 millones del mes anterior, con una suba interanual de 47% en términos nominales.
El análisis finaliza advirtiendo que no se espera "una gran expansión del crédito a lo largo del año", ya que "la demanda y la oferta de préstamos continuarán afectadas por la caída de la actividad y una inflación desacelerando, pero todavía elevada".