La firma pide a los accionistas que sigan la junta en remoto por sostenibilidad
MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
Telefónica ha convocado este viernes su junta general de accionistas, prevista para el 31 de marzo en segunda convocatoria y con la nueva política de remuneraciones de los consejeros para el periodo 2024 y 2026 como principal novedad.
La compañía también someterá al voto de sus decisiones mantener en 0,30 euros en efectivo el dividendo y la amortización del 0,43% del capital, lo que supondrá reducir el capital social de la sociedad en 24,77 millones de euros, según la convocatoria publicada ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El consejo de administración de la compañía también pedirá a los accionistas que le faculten para en los próximos cinco años a lanzar nuevos programas de autocartera.
Asimismo, se ha incluido en el orden del día un llamamiento para que los accionistas no acudan en persona a la junta, sino que lo hagan de forma telemática para "contribuir a la gestión sostenible de el evento". Además, también se ha aclarado que no habrá obsequios para los accionistas.
El orden del día también contempla los puntos preceptivos de apoyo a la gestión de la compañía como la aprobación de las cuentas anuales e informe de gestión de 2022, la aplicación de resultado y el informe de remuneraciones del pasado ejercicio.
Por último, los accionistas deberán reelegir a PricewaterhouseCoopers Auditores (PwC) como auditor de las cuentas del grupo para 2023.
POLÍTICA DE REMUNERACIONES ESTABLE
La nueva política de remuneraciones seguirá la senda de la anterior y mantendrá intacto el salario fijo del presidente y el consejero de la entidad, con 1,9 y 1,6 millones de euros, respectivamente.
Además, también permanecerán inalteradas las condiciones de blindaje, que incluye indemnizaciones de hasta cuatro anualidades en caso de cese y dos años de pacto de no competencia.
En el caso del resto de consejeros, recibirán 120.000 euros más una dieta de 1.000 euros por asistencia a las reuniones de las comisiones consultivas o de control. En el caso del presidente del consejo, percibirá 240.000 euros, mientras que los vicepresidentes, 200.000 euros.
Por otro lado, la participación en una comisión delegada se retribuirá con 80.000 euros y la participación de Comisiones Consultivas o de Control con 11.200 euros, excepto en el caso del presidente, que recibirá 22.400 euros.
PAGOS VARIABLES
En el caso de los consejeros ejecutivos, el pago variable seguirá pudiendo suponer hasta casi un 80% de la remuneración, lo que, según la firma, refuerza el compromiso a largo plazo de estos con el futuro de la empresa.
En lo que concierne al presidente, José María Álvarez Pallete, en este plan pesará más el variable a largo plazo (42%), que en el corto plazo (37%), unos porcentajes que prácticamente se invierten en el caso del consejero delegado, donde el corto plazo puede llegar a suponer el 43% de lo que percibe y el largo, un 38%.
Estos porcentajes se dan en caso de que la empresa cumpla el escenario 'target' que marcará anualmente el Consejo y que supondrá un pago de hasta el 180% de la retribución fija para el presidente (3,4 millones de euros) y un 150% para el consejero delegado (2,4 millones de euros), en el caso de los objetivos más inmediatos.
Por su parte, en el caso de cumplir los objetivos a largo plazo, José María Álvarez Pallete optará a un 200% de su retribución fija (3,84 millones de euros), mientras que el consejero delegado, Ángel Vilá, a un 180% (2,89 millones de euros).
En el caso de que se sobrepasen los objetivos a corto plazo, los directivos pueden ver aumentada su remuneración si se alcanzan los calificados como objetivos 'máximos' hasta el 233,1% de su retribución fija en caso del presidente ejecutivo y un 194,25% en el caso del consejero delegado, lo que equivale a 4,4 millones de euros y 3,1 millones de euros.
De esta forma, en el mejor de los casos, los sueldos del presidente y consejero delegado podrían llegar a ascender a 10,14 millones de euros y 7,59 millones de euros, a lo que se suman aportaciones al plan de pensiones y seguros.
Los objetivos a corto plazo estarán relacionados con métricas financieras, como ingresos, resultados, flujo de caja, retoro o control del gasto y la deuda; y no financieras, como la satisfacción de clientes, diversidad de empleados y brecha salarial de género, número de mujeres ejecutivas y transición ecológica.
A largo plazo, el tipo de objetivos es similar, pero se incluye también al generación de valor para los accionistas, con métricas como la evolución de la acción.
Estas remuneraciones pueden pagarse en metálico o incluir la entrega de acciones, opciones sobre acciones o derechos retributivos vinculados a su valor.