VÉLEZ-RUBIO (ALMERÍA), 13 (EUROPA PRESS)
La Junta de Andalucía y el Gobierno de la Región de Murcia han corroborado la presencia de tres nuevos cachorros de lince ibérico (Lynx pardinus) en el municipio almeriense de Vélez-Rubio. Las imágenes obtenidas mediante cámaras de fototrampeo muestran a la hembra 'Tahúlla' acompañada de su nueva camada, fruto de su emparejamiento con 'Queo', un macho andaluz liberado expresamente a finales de 2024 para favorecer esta unión.
El registro confirma no sólo la segunda reproducción de una hembra liberada en la comunidad autónoma de Murcia desde el inicio de las reintroducciones, sino también el éxito técnico de una estrategia de conectividad que demuestra la funcionalidad real de los corredores ecológicos entre territorios vecinos, ha subrayado la Junta en una nota de prensa.
El hallazgo sitúa a la comarca de Los Vélez en el mapa de reproducción del lince ibérico y refuerza la apuesta andaluza por consolidar áreas emergentes al este de la comunidad autónoma. La trayectoria de 'Tahúlla' ilustra bien ese proceso: procedente del centro de cría de La Olivilla (Jaén), fue liberada en marzo de 2023 en los Altos de Lorca y, tras su dispersión, encontró en el entorno almeriense condiciones idóneas de hábitat y alimento.
El seguimiento coordinado entre equipos técnicos de Andalucía y Murcia --incluida la visualización de datos de collares GPS y la cooperación sobre el terreno-- ha permitido documentar con precisión sus desplazamientos y su asentamiento estable en Sierra María-Los Vélez.
La nueva camada se suma a la dinámica expansiva que Andalucía lidera desde hace dos décadas con el impulso de sucesivos proyectos LIFE. En 2002 apenas quedaban 94 ejemplares en la Península Ibérica, concentrados en su mayoría en la comunidad autónoma andaluza; actualmente la situación es radicalmente distinta. El último censo disponible de 2024 cifra en 2.401 los linces ibéricos presentes en la península, un salto demográfico al que Andalucía contribuye de forma decisiva, con 836 individuos en su territorio, casi el doble que en 2019 gracias al esfuerzo continuado en conservación, conectividad y convivencia con el territorio.
El avance en Vélez-Rubio no es un hecho aislado, sino la consecuencia de un trabajo metódico de evaluación de hábitat, disponibilidad de presas, conectividad y aceptación social, según sostiene la Administración autonómica. El diseño de nuevas áreas de presencia se nutre del conocimiento que aportan los movimientos de ejemplares como 'Tahúlla' y de actuaciones planificadas para reforzar la conectividad genética y demográfica. Dentro de esa estrategia se enmarcó la liberación, a finales de 2024, del macho 'Queo', procedente de Doñana-Aljarafe, con la finalidad de favorecer su unión con 'Tahúlla' y consolidar un nuevo núcleo reproductor en la zona de Sierra María.
El nacimiento de los tres cachorros confirma que la decisión ha tenido un "efecto inmediato y exitoso" en la expansión del lince ibérico hacia el oriente andaluz. El liderazgo andaluz en la conservación del lince ibérico se ha construido sobre una alianza amplia que integra ciencia, gestión pública y compromiso social. Los proyectos LIFE --con LynxConnect como referencia más reciente-- han articulado la colaboración entre administraciones autonómicas, centros de cría, universidades, ONG, propietarios de fincas, agricultores, ganaderos, cazadores y el propio tejido mediático y educativo. Ese trabajo compartido ha demostrado que la conectividad entre áreas de reintroducción es una realidad medible en la que nacimientos como el de Vélez-Rubio actúan como hitos verificables.
Andalucía mantiene, además, una agenda activa de creación y consolidación de nuevos hábitats. El ejemplo de Sierra Arana, en Granada, es paradigmático: tras un proceso riguroso de adaptación y seguimiento, en 2024 se registraron nacimientos en libertad en un enclave donde hacía décadas que no se constataba reproducción, con una pareja formada a partir de ejemplares liberados el año previo. Este resultado se asienta en liberaciones planificadas y en la mejora de la conectividad ecológica entre áreas, fortaleciendo la expansión natural hacia el oriente peninsular.
El incremento poblacional obliga a redoblar la atención sobre las amenazas más relevantes, especialmente la mortalidad por atropellos. Andalucía ha sido pionera en la implantación de medidas preventivas que combinan soluciones tecnológicas y de comportamiento del conductor: sistemas anticolisión (AVC), barreras virtuales, señalética específica y paneles de alerta diseñados para captar la atención en tramos críticos.
A estas iniciativas se suma la adecuación de infraestructuras en corredores linceros, como la intervención reciente en la A-308 (Granada), orientada a mejorar la seguridad vial y, a la vez, proteger la fauna. La experiencia demuestra que conservación y desarrollo pueden convivir cuando la planificación incorpora la variable ambiental desde el inicio. En paralelo, la red de núcleos de reproducción consolidados aporta estabilidad al crecimiento. Doñana-Aljarafe, Sierra Morena Oriental, Sierras Subbéticas, Campiñas del Guadalquivir y las áreas de conexión funcionan como pilares de una metapoblación que, año tras año, suma hembras territoriales y crías en libertad.
La expansión hacia nuevas áreas como Sierra María-Los Vélez se apoya en esa base demográfica y en el aporte genético de los centros de cría, que permiten ajustar las reintroducciones a las necesidades de conectividad y diversidad. La historia reciente del lince ibérico en la península está íntimamente ligada a Andalucía. Todos los individuos hoy presentes en España y Portugal descienden de 75 hembras andaluzas que resistieron el momento más crítico.
Ese patrimonio genético, custodiado y gestionado con criterios científicos y con una gobernanza coordinada, explica que la comunidad se mantenga como referencia internacional en recuperación. Desde esa posición, Andalucía comparte conocimiento y "forja alianzas" con regiones como Murcia, Castilla-La Mancha, Extremadura o el Alentejo portugués.
Andalucía compartirá estas experiencias en el Congreso Internacional sobre conservación del lince ibérico que se celebrará en Sevilla el próximo mes de noviembre, bajo el lema "Visión compartida, acción coordinada". Será un espacio de evaluación y de impulso, en el que se pondrán sobre la mesa los aprendizajes de estos años y las prioridades del próximo ciclo de financiación europea, con la vista puesta en mantener la tendencia positiva de la población y en seguir tejiendo corredores que, como el de Vélez-Rubio, transforman el mapa de la especie.