Caracas acusa a la oficina de Derechos Humanos de la ONU de guardar un "silencio cómplice" en otros casos por intereses políticos
MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
La oficina de la ONU para los Derechos Humanos ha expresado este martes de nuevo su preocupación por la detención y desaparición "forzada" de personas críticas con el Gobierno de Venezuela, ya que entiende que alimenta "un clima de miedo" en el país sudamericano, y ha reclamado la liberación "inmediata" de todas las personas que hayan podido ser arrestadas de manera arbitraria.
La "intimidación" y la "persecución" se han recrudecido desde las controvertidas elecciones presidenciales de julio de 2024, ha señalado una portavoz de la oficina, Liz Throssell, que citado entre los últimos casos el del abogado Eduardo Torres, arrestado cuando se dirigía a su casa en Caracas la semana pasada.
La ONU tiene constancia de la muerte de al menos tres opositores desde los comicios, por lo que ha pedido una investigación "completa" e "independiente", y ha instado a las autoridades a proporcionar también información sobre el paradero y la situación de quienes siguen recluidos.
Por otro lado, y en medio de estas "crecientes restricciones al espacio cívico", Throssell ha reclamado la derogación de la denominada Ley de Fiscalización, Regularización, Actuación y Financiamiento de Organizaciones No Gubernamentales y Organizaciones Sociales sin Fines de Lucro, ya que considera que tiene una redacción "vaga" y en última instancia "socava los derechos a la libertad de expresión y asociación".
VENEZUELA DENUNCIA UN DOBLE RASERO
El Ministerio de Exteriores de Venezuela ha respondido a estas últimas críticas recriminando al Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Turk, y su oficina una "actitud omisiva, parcializada y cobarde", ya que entiende que desde la ONU no se están cuestionando en la misma medida "las graves violaciones cometidas contra ciudadanos venezolanos en el exterior", como por ejemplo la retención en Estados Unidos de una niña.
El Gobierno de Nicolás Maduro ha recriminado a Turk su "silencio cómplice" en este caso, evidencia de "un doble rasero inaceptable". "Mientras ataca con virulencia a Venezuela, guarda silencio ante los abusos cometidos por gobiernos alineados con intereses hegemónicos. Pareciera más enfocado en conservar su cargo que en defender los Derechos Humanos", ha señalado el Ministerio.