El primer ministro libanés asegura que las palabras del secretario general de Hezbolá "conllevan una amenaza velada de guerra civil"
MADRID, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del partido-milicia libanés Hezbolá, Naim Qasem, ha advertido este viernes al Gobierno de que no renunciará en ningún caso a la "resistencia" armada mientras Israel persista en su "agresión", en una crítica frontal a la propuesta de desarme presentada por Estados Unidos y respaldada por el Ejecutivo libanés.
El proyecto plantea que el Ejército sea el único grupo con potestad para seguir armado, pero para Qasem "priva a Líbano, a la resistencia y a su pueblo de su capacidad para defenderse en plena agresión". "Este Gobierno está ejecutando una decisión estadounidense y sirviendo al proyecto israelí, sea consciente de ello o no", ha sentenciado el líder de Hezbolá en un duro discurso.
En este sentido, ha preguntado a los dirigentes políticos libaneses si se sienten "orgullosos" de recibir felicitaciones del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el mismo que el pasado domingo aludió al "Gran Israel", en una referencia histórica que no ha gustado a los países árabes vecinos por las connotaciones soberanistas implícitas.
Qasem ha subrayado que el Ejecutivo libanés será el único responsable de cualquier futura disputa interna y se ha desmarcado en cualquier caso de sus posicionamientos, indicando que "la resistencia no obtiene su legitimidad del Gobierno", según el periódico 'L'Orient le Jour'.
En cambio, sí ha agradecido el respaldo recibido por Irán, país al que reconoce su apoyo político y armamentístico. Teherán también ha criticado el plan de desarme presentado por Washington, lo que ha sido recibido desde Beirut con acusaciones de injerencia en cuestiones que, según entiende, serían de soberanía interna.
En respuesta, el primer ministro libanés, Nawaf Salam, ha afirmado que las palabras del secretario general de Hezbolá "conllevan una amenaza velada de guerra civil". "Nadie en Líbano desea una guerra civil y cualquier amenaza o intimidación es completamente inaceptable", ha argüido en un mensaje publicado en la red social X.
Salam ha tildado de "falso" que el Gobierno libanés esté "implementando un proyecto estadounidense-israelí" en el país. "Nuestras decisiones son puramente nacionales, tomadas por nuestro consejo de ministros y nadie nos dicta qué hacer", ha sentenciado.
El primer ministro libanés ha reiterado así en redes sociales que en virtud del Acuerdo de Taif --firmado en 1989 y que puso fin a la guerra civil en Líbano-- "no existe ninguna parte autorizada a llevar armas al margen del Estado".
"Nadie ha pedido que se entreguen las armas de Hezbolá al enemigo israelí, como algunos quieren hacen pensar, sino al Ejército libanés", ha indicado Salam, instando al partido-milicia a evitar "acciones irresponsables que incentiven la sedición".